China es uno de los países más extensos de la Tierra y
de más antigua cultura.
Se cree que estuvo habitada desde
tiempos muy remotos, pero los primeros datos históricos se remontan,
aproximadamente, al año 1000 a. C.. China se mantuvo aislada y casi desconocida
para los europeos hasta los viajes de Marco Polo en los siglos XIII y XIV.
A partir de
entonces comenzaron a difundirse muchos descubrimientos de los chinos, como la
seda. El bolso en la China antigua fue además un complemento que se entroncaba
con las costumbres de todas las clases sociales.
El hebao (tipo limosnera)

El
bolso o hebao en China es un tipo de adorno que forma parte de la vestimenta
tradicional, usado en la antigüedad para llevar objetos personales sueltos,
como los monederos de hoy en día. Normalmente tienen bellas formas, como
redondeado, alargado, similar a un melocotón, un ruyi o una guayaba y se puede
distinguir según el área del país de la que proceda. Fue creado a partir del
nangbao, un tipo de bolso pequeño en el que se guardaban algunas monedas, un
pañuelo y otras cosas diminutas, debido a que siglos atrás la ropa no tenía
bolsillos. Los primeros nangbao se podían llevar en la mano o en la espalda,
pero debido a lo incómodo que resultaba en ocasiones cargarlo, con
posterioridad se encontró la manera de atarlo al cinto. El material más usado
para su confección era el cuero. La historia de llevar una bolsa se remonta a
antes de la dinastía Qin o mucho más atrás. A día de hoy, el primer bolso
desenterrado en China es uno hecho durante el Periodo de Primavera y Otoño (770
a.e.c. – 476 a.e.c.) y los Estados Combatientes (475 a.e.c. – 221 a.e.c.). La
denominación actual de hebao apareció después de la dinastía Song (960 – 1279)
para referirse a un pequeño bolso que podía contener objetos personales o de
valor, como dinero y el sello personal. Esta costumbre continuó durante la
última etapa de la dinastía Qing (1644 – 1911) y principios de la República de
China (1912 – 1949), cuando desapareció de las ciudades debido a las reformas
en las ropas, que traían incorporado el bolsillo de uso común. No obstante, todavía
es popular en algunas zonas rurales y áreas de minorías étnicas, de modo que la
artesanía popular, que tiene un profundo y amplio significado, se puede
trasmitir a los tiempos modernos. Un bolso está compuesto por dos partes, el
interior y el exterior. Regularmente, por fuera presenta algún bordado
elegante, mientras la boca es enhebrada con una cuerda de seda que se puede
apretar o aflojar para cerrarlo o abrirlo. Llaman la atención su gran variedad
de diseños y modelos, los cuales se ajustan a los diferentes usos, pero el de
la suerte es el tema más común. Mariposas y flores representan el deseo de amar
y casarse, melones dorados y niños denotan longevidad y más hijos, al igual que
la imagen del kylin, una criatura mitológica china, llevando un niño. Otros
expresan buenos deseos a través de determinados animales y plantas, como los
murciélagos y las flores de loto. Diversos temas trasmiten distintas emociones.
El bolso para perfumes

De
todos los tipos de bolsos folclóricos, los bolsos de perfume (comúnmente
llamados xiangbao, xiangnang o xiangdai) representan una proporción
considerable. Originalmente era una tradición llevar uno durante la Fiesta de
los Botes de Dragón, que tiene lugar el quinto día del quinto mes del
calendario lunar, y colocar en su interior una fragancia de hierbas y bordarlo
con un diseño de cinco animales venenosos (el escorpión, la serpiente, el
ciempiés, el geco y el sapo), los cuales se dice que, con su olor único, alejan
los espíritus malignos y la perversidad y traen riqueza y buenos auspicios para
siempre. La costumbre de llevar una bolsa de perfume ha sido practicada desde
tiempos inmemoriales. Se dice que, en el pasado, cuando las personas iban de
caza, portaban una bolsa de medicinas para expulsar las pociones de los
insectos venenosos. Durante la dinastía Qing, el hebao de perfume era llevado
por las personas no solo en los días del Festival de los Botes de Dragón, sino
en todo momento, porque los manchúes tenían esta costumbre desde hacía mucho
tiempo. Según la tradición Qing, los emperadores y las emperatrices eran
obligados a llevar una bolsa de perfume con ellos a lo largo del año, y luego
de 12 meses o al final de un festival importante, el emperador debía premiar a
las princesas y ministros con una bolsa de perfume para mostrarles su
agradecimiento. A día de hoy, el hebao de perfume es un gran obsequio
tradicional o un símbolo de la fortuna y se puede encontrar en una gran variedad
de elegantes estilos y hermosos diseños.
El bolso manchú llamado Fadu

Desde
hace miles de años, en el norte de China es muy conocida una encantadora
canción de amor titulada Bolso bordado, que habla de una joven esposa que, en
el bordado de un hebao que ella hace para su marido, le expresa su amor y pesar
al ser separada de él. Muchos grupos étnicos tienen la costumbre de llevar un
bolso. Entre ellos están los manchúes, que los usan como parte de sus
tradiciones, y el bolso manchú, identificado como fadu en el lenguaje de esa
etnia es el único que tiene un gusto completamente étnico. Los antepasados del
pueblo manchú vivían de la caza, que realizaban por montañas densamente
pobladas de árboles, donde se encontraban con aves y fieras, de ahí que
llevaran atada a la cintura un tipo de bolsa hecha de cuero, en la que
guardaban su comida. Posteriormente los manchúes abandonaron las zonas
montañosas y comenzaron a vivir de la agricultura, por lo que aquellos fadúes
se convirtieron en algo pequeño y delicado que únicamente contenía dulces. Las
mujeres utilizaban pequeñas piezas de seda y satín para coser las bolsas y las
bordaban con flores y dibujos de aves. Este es el origen del fadu manchú,
también usado para llevar perfume y tabaco.